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El Sr. Monk va al dentista
Dentista
Información
Número de episodio: 4.15 (60)
Título original: Mr. Monk Goes to the Dentist
Guionista: Tom Scharpling
David Breckman
Director: Jefery Levy
Duración: 42 min. (aprox.)
Fecha original de emisión: 10/03/2006
Episodio anterior: El Sr. Monk y el astronauta
Episodio siguiente: El Sr. Monk actúa de jurado

El Sr. Monk va al dentista es el decimoquinto episodio de la cuarta temporada de Monk.

Argumento[]

En una lluviosa noche, un furgón blindado recorre una calle desierta. Los dos conductores conversan sobre su vida personal, y mencionan que van con tiempo de sobra. Cuando se detienen en un semáforo en rojo, unos hombres se bajan de un camión y apuntan con sus rifles al furgón. El elevador hidráulico se activa, descendiendo el volquete a la altura del suelo. Un camión de la basura aparece detrás del furgón blindado y le empuja hacia el volquete del camión mayor. Los conductores intentan pedir ayuda por radio, pero los secuestradores han cortado la señal. Cuando el semáforo se pone en verde, el gran camión continúa su camino.

Tres días después, el furgón blindado es encontrado en un almacén vacío. Ambos guardias han sido disparados hasta la muerte. El teniente Disher explica al capitán Stottlemeyer que los guardias opusieron resistencia, y que tal vez hirieron a uno de los secuestradores. Stottlemeyer ordena revisar los hospitales en busca de pacientes con heridas de bala o de arma blanca. También nota que los atracadores dejaron la mayor parte del dinero allí.

Un terrible dolor de muelas hace que Disher no pueda seguir hablando. Exasperado, el capitán le ordena que vaya al dentista. El teniente promete hacerlo.

Monk y Natalie llegan al lugar. El detective encuentra varias pistas que sugieren que el furgón fue secuestrado y trasladado hasta el almacén: el parachoques trasero está gravemente dañado (allí donde el camión de la basura le empujó), los espejos laterales han sido doblados hacia dentro, y en el suelo hay huellas de neumáticos de un camión de dieciocho ruedas. Stottlemeyer se pregunta cómo obligaron a los conductores a abandonar la cabina. Monk encuentra un tubo de plástico en el guardabarros trasero, y nota que encaja con un pequeño agujero del plexiglás de la ventana de atrás. Esto indica que los guardias fueron gaseados.

Esa noche, Randy visita la consulta del doctor Oliver Bloom y de su ayudante Terri. El dentista adivina el rango de Disher, ya que él lleva casi todos los seguros médicos de la policía. Bloom pone al teniente bajo anestesia para quitarle la muela infectada.

Mientras está sedado, Randy cree ver a un hombre irrumpiendo en la consulta. Este pregunta a Bloom y a Terri qué es lo que han hecho con Barry Bonds (insiste en que vale trece millones de dólares). Ante la desesperación del intruso, Bloom se lanza sobre él, y Terri le golpea repetidas veces con cierto objeto.

Cuando por fin recobra la consciencia, Disher nota que Bloom y Terri están perfectamente, y que no hay el menor signo de una intrusión. Randy intenta interrogar al dentista sobre la pelea, pero este se limita a extenderle una receta para el dolor. Terri le regala una pegatina.

El día siguiente, en la comisaría, se organiza un equipo para investigar el secuestro del furgón blindado. Un agente entrega a Stottlemeyer una copia del manifiesto del furgón: los atracadores sólo se llevaron diez millones en certificados bancarios negociables. Justo entonces, Disher llega y explica al capitán que cree que Bloom ha asesinado a alguien. Stottlemeyer está seguro de que fue un efecto de la anestesia, pero Randy insiste: el intruso era un hombre calvo de unos ochenta y cinco kilos. También menciona que estuvo anestesiado durante dos horas (cuando Bloom había prometido que no duraría más de treinta minutos). Stottlemeyer aconseja a Randy que se tome el día libre, y le entrega el expediente del caso del furgón, para que se lo lleve a Monk.

Disher se pasa por el apartamento del detective y le pide que investigue el caso. Monk se niega (dado su miedo a los dentistas) pero acaba aceptado cuando Natalie le presiona.

Los tres visitan la consulta, pero Monk es incapaz de abandonar la sala de espera. Diciendo que se olvidó el móvil en la consulta, Disher consigue que Terri le deje entrar. Él y Natalie no encuentran pruebas de ningún asesinato, pero notan que Bloom ha comprado un equipo nuevo (lo que significa que algunos de sus componentes han sido recientemente dañados).

Cuando están despidiéndose del dentista, este ve el expediente del furgón blindado que lleva Monk. Además, Disher menciona a Barry Bonds para ver cómo reacciona Bloom.

Posteriormente, los tres son llamados a la escena de un crimen en un bosque. Dos pescadores han encontrado un cadáver. Stottlemeyer señala que han encontrado plexiglás en sus pantalones (lo que indica que fue él quien gaseó a los conductores del furgón). Dan la vuelta al cuerpo, y Disher lo reconoce inmediatamente como el intruso al que mató el doctor Bloom. Stottlemeyer y los otros oficiales no le creen, y Randy (enfurecido) decide devolver su placa y abandonar su trabajo.

Luego, en la comisaría, un agente informa a Stottlemeyer de que han identificado al muerto como Denny Jardeen, un ex policía del Distrito de la Misión (le acusaron cinco veces de exceso de fuerza y de conducta impropia). Se jubiló anticipadamente cuatro años atrás.

Esa noche, Stottlemeyer intenta hablar con Randy, quien ha vuelto a formar su banda de rock del instituto (el Randy Disher Project) y está ensayando con los otros músicos. La banda toca su nueva canción "I don't need a badge". Stottlemeyer informa de que Bloom está totalmente limpio, y explica que Jardeen tiene un primo que estuvo en prisión, y que ahora trabaja en una compañía de camiones. Randy se niega a volver al cuerpo, y el capitán se marcha.

Stottlemeyer interroga al primo de Jardeen, Neal Graham, cuyas huellas han encontrado por todo el furgón blindado y el almacén. Neal sostiene que él no mató a los guardias (afirma que los mató Jardeen en defensa propia), y que ha almacenado el dinero en un cobertizo de su casa. Stottlemeyer menciona que han desmantelado el cobertizo y no han encontrado nada.

Mientras tanto, Terri se presenta en casa de Monk con un trapo empapado en cloroformo. Deja inconsciente a Monk y le lleva a la consulta de Bloom.

Allí, el detective se fija en un gran diente que hay en una esquina de la sala. La forma coincide con el patrón de moretones del cuerpo de Jardeen, y así resuelve el caso: durante el secuestro, los conductores opusieron resistencia a sus atacantes. Uno de ellos consiguió golpear a Jardeen en la cara, rompiéndole un diente. Como el doctor Bloom estaba en su seguro médico, fue a su consulta para que le arreglara el diente. Mientras estaba anestesiado, Jardeen mencionó en voz alta varios detalles del atraco, así como el lugar en el que había escondido los bonos bancarios del furgón (Monk explica que muchos pacientes hablan durante su anestesia).

Llevados por la codicia, Bloom y Terri visitaron la casa de Jardeen y cogieron el dinero robado (creyendo que su paciente no recordaría haber dicho nada). Se equivocaron: Jardeen lo recordaba todo, o es posible que lo supusiera. En cualquier caso, se presentó en la consulta del dentista la noche en que Disher estaba siendo atendido. Durante la pelea, Terri alcanzó el diente y golpeó con él a Jardeen en el pecho, matándole. Luego se deshicieron del cadáver.

Por desgracia, atado a su silla, Monk no puede hacer demasiado para probar su teoría. El doctor Bloom se dispone a torturarle para que le revele la situación de la policía en la investigación. Quieren vender los bonos a un comprador de Chicago, pero antes necesitan saber si la policía estará vigilándole.

Mientras tanto, intentando decidir un nuevo nombre para su banda, Disher lee una noticia en el periódico y comprende lo que está pasando: no era Barry Bonds quien valía trece millones de dólares... eran los bonos bancarios. Rápidamente, el teniente se dirige a la consulta de Bloom.

Monk consigue entretener a Bloom (pidiéndole que se lave las manos), el tiempo suficiente hasta que Stottlemeyer y Disher llegan para arrestarle.

El teniente recupera su placa y se reincorpora al cuerpo de la policía. Monk advierte que se le mueve un diente, y Natalie le dice que tendrá que ir al dentista. Monk se niega: ahora, tiene verdaderos motivos para temer a los dentistas.

Personajes y reparto[]

Enlaces de interés[]

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